La práctica de snorkeling, o buceo en superficie, consiste en el desplazamiento impulsado por el aleteo con las piernas por la superficie del agua, sin necesidad de contar con mucha potencia ni velocidad. Se realiza con la intención de observar el fondo y la vida acuática, mientras se respira continuamente a través de un tubo o también conocido como snorkel. Esta actividad no reviste ningún tipo de complejidad, es divertida y relajada, por lo que no requiere demasiada exigencia física y es apto para cualquier persona que goce de buena salud.
El sector elegido es una bahía alejada del tráfico frecuente, de aguas tranquilas. No existen riesgos por fauna o flora peligrosa, ya que todos los habitantes del lago son inofensivos para la salud humana. Los trajes de neopreno contienen gran cantidad de aire en su material, evitando al 100% el hundimiento (POR ESTE MOTIVO NO ES NECESARIO SABER NADAR, AUNQUE ES ACONSEJABLE). Esto le brinda además una gran capacidad aislante, que permite separar la piel, del agua circulante alrededor, manteniendo así la temperatura corporal, por lo que el frío no es un impedimento para disfrutar de la excursión. Por tratarse de una actividad de bajo riesgo, esta podrá ser realizada, por personas de entre 14 y 60 años de edad, siendo que los menores de 18 deberán estar acompañados por un mayor responsable. Previo a la excursión, todos los participantes deben leer y firmar un texto con las indicaciones y detalles de la actividad. Incluyendo la importancia de manifestar cualquier tipo de afección física, que pudieran interrumpir el normal desarrollo de la excursión. Asimismo se realiza una charla sobre el equipo, la técnica de snorkel y las medidas de seguridad.